El mundo enfrenta su mayor crisis de desplazamiento humano
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha publicado cifras alarmantes: más de 122 millones de personas se encuentran desplazadas de sus hogares a nivel mundial en 2025, lo que representa el mayor éxodo forzado en la historia moderna.
Los principales factores detrás de este fenómeno son los conflictos prolongados en Sudán, Myanmar y Ucrania, además de crisis persistentes en Siria, Afganistán y regiones del Sahel africano.
Las cifras detrás del drama humano
Según el informe publicado en junio, el número de desplazados ha aumentado en más de 8 millones respecto a 2024, impulsado por:
- La guerra civil en Sudán, que ha desplazado a más de 9 millones de personas.
- El recrudecimiento del conflicto en Myanmar, con comunidades enteras huyendo de ataques militares.
- La prolongación del conflicto entre Rusia y Ucrania, especialmente en regiones del este y sur del país.
- El colapso climático y la violencia armada en el Sahel, que expulsan a familias enteras en busca de refugio.
Estas situaciones están generando presión extrema sobre los países vecinos, muchos de los cuales ya enfrentan dificultades económicas propias.
La ayuda internacional, en crisis
Además de la magnitud del desplazamiento, la capacidad de respuesta humanitaria está colapsando. ACNUR y otras agencias de la ONU advierten que los recortes presupuestarios en ayuda internacional, especialmente por parte de EE. UU. y Reino Unido, están provocando el cierre de programas esenciales en campos de refugiados y zonas de tránsito.
Filippo Grandi, Alto Comisionado de ACNUR, advirtió:
“Estamos viendo cómo las necesidades crecen a un ritmo exponencial, mientras el financiamiento humanitario se reduce. Esta combinación es insostenible.”
Riesgos a largo plazo: pobreza, salud y radicalización
Los expertos alertan que si no se toman medidas urgentes, la situación podría derivar en:
- Crisis sanitarias por falta de acceso a agua potable y servicios de salud.
- Pérdida educativa para millones de niños desplazados.
- Radicalización de jóvenes sin oportunidades en entornos vulnerables.
- Inestabilidad regional y aumento de la migración hacia Europa y América del Norte.
Conclusión
La cifra de 122 millones de desplazados en 2025 no es solo un número, sino una llamada urgente a la acción internacional. La falta de inversión y coordinación global pone en riesgo la vida, dignidad y futuro de millones de personas.
Para enfrentar esta crisis, los gobiernos, organismos multilaterales y sociedades deben replantear sus prioridades y reforzar el compromiso con la protección de los más vulnerables.
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