En una época en la que el bienestar se ha convertido en sinónimo de status, muchas personas, especialmente jóvenes adultos, sienten que no están haciendo “lo suficiente” para estar saludables. Lo que comenzó como una búsqueda de equilibrio se ha transformado para algunos en una fuente más de presión: comer limpio, entrenar diario, meditar, dormir 8 horas… todo o nada. Pero ¿qué pasa cuando el autocuidado se convierte en una carga?
El lado oculto del wellness
Desde TikTok hasta Instagram, abundan videos de “mañanas perfectas”, smoothies verdes, yoga al amanecer y suplementos que prometen longevidad. Aunque estos contenidos pueden inspirar, también generan un ideal inalcanzable que lleva a la ansiedad por la salud (health anxiety) y al perfeccionismo del bienestar, un fenómeno cada vez más observado por psicólogos clínicos.
Según la terapeuta Simone Alicia (entrevistada por news.com.au), esta presión por “hacerlo todo bien” lleva a que las personas vivan con culpa cuando fallan en mantener su rutina perfecta. En lugar de sentirse motivadas, muchas terminan agotadas o abandonando por completo sus prácticas saludables.
¿Bienestar o burnout?
Esta obsesión puede tener consecuencias:
- Estrés crónico por “fallar” en mantener hábitos saludables.
- Culpa constante ante el descanso o la indulgencia (como comer algo no “fit”).
- Relaciones deterioradas si se prioriza el wellness sobre la conexión social.
- Desmotivación por autoexigencia excesiva.
En vez de generar balance, la rutina de autocuidado se convierte en una lista de tareas que, si no se cumplen, minan la autoestima.
El principio del 2 de 3
Para combatir esta dinámica, terapeutas proponen el método “2 de 3”: si logras dos de tus tres pilares del día (ej. dormir bien, comer sano, moverte un poco), es suficiente. Este enfoque más flexible ayuda a reducir la autoexigencia y cultivar una relación más sana con el cuerpo y la mente.
Además, elegir prácticas de bienestar que se disfruten (en lugar de seguir modas) y reconocer que el descanso también es autocuidado, son claves para construir hábitos sostenibles.
En resumen
El bienestar no debería sentirse como una carga. Cuidarse es importante, pero no a costa de la salud mental. Abrazar la imperfección, ser compasivos con nosotros mismos y buscar equilibrio real, no ideal—es la nueva revolución del wellness.
Referencias
- News.com.au – Why your wellness routine might be working against you
- Medical News Today – How health anxiety is changing in the social media era
- The Guardian – The dark side of wellness culture